... y así se empieza

diciembre 2010

La verdad la primera vez nunca imaginé soñar con él, aquel que me quería con el amor más inocente del mundo, al que nunca me había tomado la molestia de querer de la misma manera que él a mí…



Todo empezó en un castillo de piedra, que por dentro parecía la recepción de un gran hotel, pero al salir de allí se podían observar dos grandes torres a los costados de aquel raro castillo. Yo caminaba muy cómoda tomada de su mano, de repente noté que alguien nos perseguía, era una chica de pelo largo con ondas, tenía una corona puesta, parecía toda una princesita, pero por alguna razón sabía que Ella quería quitármelo...  Comenzamos a correr por el terror de estar separados el uno del otro, hasta que llegamos a un lugar que parecía ser la salida trasera de aquel gran castillo; estábamos parados en un gran piso de piedra que estaba rodeado de miles de árboles; en aquel piso de piedra podían distinguirse unos dibujos que habían sido hechos con yeso, tal como los niños hacen sus “obras de arte” en las banquetas. Él comenzó a leer aquellos jeroglíficos que yo no podía entender, según lo que él “podía leer” decía que él y ella debían de estar juntos para que todo estuviera bien, para que no pasara nada malo, nada lamentable. En ese momento sentí como la tristeza me consumía al saber que no era mío, que nunca lo había sido, y que jamás volvería a verlo. De repente él me abrazó muy fuerte, y en ese abrazo se acercó a mi oído y susurro: “pero sabes que mi corazón siempre será tuyo”, luego de eso beso mi mejilla, y yo, entre lágrimas, besé la de él, y nos quedamos en aquel eterno abrazo hasta que llegó ella a reclamarlo como suyo…


Me desperté con la sensación de que estaba rota, incompleta, hasta que caí en la cuenta de que todo había sido un sueño, un tonto y estúpido sueño; no me sentía frustrada ni triste, sólo algo confundida, ya que nunca había pensado en él verdaderamente de esa manera.


La segunda vez fue algo más rara.
Soñé que me encontraba dormida en mi cuarto, sin saber por qué, me despertaba y comenzaba a bajar las gradas de mi casa, y por alguna razón sabía que él iba a estar allí abajo durmiendo en el mismo cuarto que su hermana. Llegué a encontrarme con él en ese oscuro cuarto, en el que él estaba arrinconado a la orilla de la cama, a pesar de que la cama era muy grande y no parecía estar nadie más que él y su hermana arrinconada durmiendo al otro lado de la cama. Me acerqué hasta donde él estaba y me acosté a su lado, recostada en su brazo mientras le contaba que había soñado con él hacía varios días, y comencé a contarle todo el sueño. Recuerdo que mientras se lo contaba me sentía tan cálida y querida a su lado, sentía que lo quería de una manera tan humana, tan sencilla, tan inocente, pero tan perfecta, tan profunda… De repente él besó mi frente justo cuando mi madre se asomaba a la puerta y comenzaba a decir que por qué me había tardado tanto. Ella dijo: “tu papá te está buscando y ya sabe lo que hiciste”, al mencionar esas palabras sentí miedo, así que me levanté de la cama y comencé a salir por la puerta de aquel dormitorio; mientras más me acercaba a la puerta empecé a notar que mi madre no venía sola, traía con ella a aquel que más de alguna vez había amado, y 2 amigas mías. No tuve tiempo de despedirme de nadie y comencé a subir las escaleras con aire preocupado. Llegamos de nuevo a mi cuarto y mi madre y mis 2 amigas habían desaparecido y solo quedaba aquel que una vez fue mi corazón… Se asomó a la ventana y comenzó a observar el cielo mientras decía: “ya te olvidé, y… no me agradas”. Al oír estas palabras sentí como mi interior se desmoronaba, sentía que todo el esfuerzo que en más de algún momento había hecho yo por buscarlo había sido en vano, ya que lo busqué tanto solo para decirle que quería seguir amándolo, pero como a un amigo… Luego de eso comenzamos a conversar, como si no hubiera dicho nada de mayor importancia. Solo que la “conversación” que tuvimos no quedó muy clara en mi memoria ya que solo recuerdo el ruido que hacían nuestras voces al hablar…


Me desperté pensado muchísimo, pensaba en él, en Ellos, pero más en aquel que me había hecho sentir tan cálida, aunque hubiera sido solo de una manera utópica… Desde ese día, ese sueño, no lo saco de mi cabeza, pienso en él cada vez antes de dormirme, pienso en qué pasaría si mis sueños se convirtieran en realidad, que pasaría si después de tantos años él podría llegar a quererme de nuevo de aquella manera en lo que lo hizo hace 4 años, pienso en las miles de posibilidades, pero sé que el amor no puede surgir de la nada… pero me encanta fantasear de esa manera, porque con soñar nada se pierde, pero de igual manera nada se gana…


"I don’t wanna hear the sound
of losing what I’ve never found".
- JASON WALKER-DOWN


"Don’t wake me cause I am dreaming
of angels on the moon,
where everyone you know
never leaves to soon".
- THRIVING IVORY-ANGELS ON THE MOON