Mucho
Agosto 9 y 11 de 2013
THE REASON/ HOY HACE UN AÑO... DE NUEVO
Mis palabras salían sin control, pero seguras...
Me gusta. Me gusta mucho. Lo quiero en serio y hay algo que me impide decírselo, algo que dice que aún no es el momento de hacerlo.
Es una persona increíble, única, interesante, agradable, graciosa.
Hablar de eso hoy extendió mi panorama, fue decir todo lo que había sentido, todo lo que he estado sintiendo, sin hallar el por qué, aceptando que me encanta.
Confesar que desde antes de cualquier cosa había rogado a Dios que si en algún momento iba a lastimarlo lo apartara de mi camino... No lo hizo. No lo ha hecho, pero mi petición es la misma desde ese entonces, poder vivir todo esto en Él, en la sinceridad, y así poder amar con su amor.
Y, por primera vez, agradezco el tiempo de Dios, jamás lo había hecho y no me siento orgullosa de aceptarlo.
Tengo esa necesidad de agradecer al universo porque cada vez me llena de más sentimientos que me desatan, cada vez me enamoro más de las pequeñas cosas, de lo que, al parecer, nadie nota.
Vuelvo a repetir: ha abierto mi mente, multiplicado mi tiempo, aminorado la necesidad que tenía de correr por temor, de alguna manera permite que acepte mis diferentes perspectivas... Me gusta mucho.
THE REASON/ HOY HACE UN AÑO... DE NUEVO
Mis palabras salían sin control, pero seguras...
Me gusta. Me gusta mucho. Lo quiero en serio y hay algo que me impide decírselo, algo que dice que aún no es el momento de hacerlo.
Es una persona increíble, única, interesante, agradable, graciosa.
Hablar de eso hoy extendió mi panorama, fue decir todo lo que había sentido, todo lo que he estado sintiendo, sin hallar el por qué, aceptando que me encanta.
Confesar que desde antes de cualquier cosa había rogado a Dios que si en algún momento iba a lastimarlo lo apartara de mi camino... No lo hizo. No lo ha hecho, pero mi petición es la misma desde ese entonces, poder vivir todo esto en Él, en la sinceridad, y así poder amar con su amor.
Y, por primera vez, agradezco el tiempo de Dios, jamás lo había hecho y no me siento orgullosa de aceptarlo.
Tengo esa necesidad de agradecer al universo porque cada vez me llena de más sentimientos que me desatan, cada vez me enamoro más de las pequeñas cosas, de lo que, al parecer, nadie nota.
Vuelvo a repetir: ha abierto mi mente, multiplicado mi tiempo, aminorado la necesidad que tenía de correr por temor, de alguna manera permite que acepte mis diferentes perspectivas... Me gusta mucho.
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